A Kevin Sebastián Sánchez Carmona lo condenaron a 37 años de prisión. Aunque, al parecer, de manera injusta. O al menos eso cree su familia. Es uno de los involucrados en el homicidio de Lina Marcela Parra en agosto de 2021. Y para esto, el juzgado sólo tomó en cuenta la versión de un testigo.
Uno de sus familiares habló con Noticias360 Digital. Dijo que tiene pruebas de todo tipo, en las que se demuestra que Kevin nunca estuvo en la escena del crimen. Sin embargo, ni la Fiscalía ni el juzgado incluyeron las evidencias en el proceso.
¿Qué pasó la noche del 9 de agosto de 2021? Cerca de las 8:40 pm se presentó un homicidio en el barrio El Campestre B, del municipio de Dosquebradas. Hombres armados le habrían disparado mientras ella conducía su vehículo.
Todo quedó ahí, hasta que el 27 de noviembre de ese mismo año cuando las autoridades capturaron a Kevin Sebastián junto a otras dos personas, conocidos con los alias de ‘Obama’ y ‘El Meme’, a quienes señalan de haber disparado a la mujer de 33 años.
LA CAPTURA
Al parecer, uniformados de la Sijin se llevaron a Kevin hasta la estación de Dosquebradas en el mismo vehículo con el que trabajaba como conductor de plataforma. “Allá me dijeron que mi hermano fue capturado por el homicidio de Lina Marcela Parra y ahí comenzó toda esta historia”.
Supuestamente, el joven de 27 años, hoy condenado por este crimen y el único que está preso, acostumbraba a estacionar el vehículo con el que trabajaba a una cuadra de donde ocurrió el asesinato. “Mi hermano trabajaba como conductor de plataforma y conocía a la víctima, incluso hasta le hacía carreras”.
UN ÚNICO TESTIGO
Al día siguiente, el 28 de noviembre, durante la audiencia preliminar, la familia de Kevin pudo presenciar que el único testigo que presentó la Fiscalía, dijo en su versión que vio el vehículo y que reconoció el carro por las placas.
Aseguró que de ese mismo carro se habían bajado dos personas. Presuntamente, ‘Obama’ y el ‘Meme’. Uno de ellos, supuestamente tenía una moto detrás del vehículo que manejaba Kevin. En el mismo relato asegura que Obama fue quien impactó a Lina Marcela y que tras dispararle la mujer cayó en el andén, luego el criminal sube a la moto y emprenden la huida por rutas diferentes; es decir, por un lado los sicarios y por el otro Kevin.
CONTRADICCIONES
Aquí comienza un juego de inconsistencias entre las declaraciones del testigo; ya que, según el familiar de Kevin, una de las calles por las que supuestamente se fue su hermano, es completamente cerrada. Lo que quiere decir, que donde ocurrió el homicidio sólo hay una vía para entrar y salir.
Además, el testigo también aseguró que la víctima habría caído muerta sobre el andén y la versión oficial señala que a ella le impactaron mientras conducía un carro. Incluso, uno de sus familiares escuchó los disparos, salió de la casa y al ver que se había estrellado, se acercó. La vio herida, la pasó al puesto del copiloto y condujo hasta una clínica.
QUÉ DICE EL GPS
Entre los elementos probatorios que intentó presentar la familia de Kevin, uno de sus familiares se comunicó con el dueño del vehículo que el joven manejaba y le solicitó que verificara a través de la aplicación el recorrido que marcaba el GPS y para sorpresa de todos, este mostraba que entre las 7 y las 9 de la noche, el joven se encontraba en otro sector de Dosquebradas, cerca a torres del Ámbar por los lados del Lago de La Pradera.
Sin embargo, pese a que se presentó esta prueba durante una de las audiencias; incluso, con una certificación de otra compañía que asegura que la aplicación muestra un contenido real, ni la Fiscalía ni el juzgado la tomaron en cuenta como evidencia de que los hechos, quizá, tenían otra historia que no se había contado, porque el dueño del vehículo falleció apenas hace un año y dijeron que cualquier prueba que hubiese suministrado a los familiares del condenado violaban la privacidad de esta persona.
Pero hay más, el dueño del vehículo con el que Kevin trabajaba como conductor de plataforma era de un policía retirado. Durante un tiempo, la familia le insistió para que diera su versión ante el juez, pero en uno de los tantos audios que compartió con el hermano, dijo que lo estaban presionado para que no hablara.
Ahora el próximo paso de la familia será apelar la decisión del juez. Pese a que ya hay una condena y que a Kevin Sebastián le fue impuesta una medida de aseguramiento intramural por 37 años. Pues, los allegados del joven aseguran que aún tienen un as bajo la manga y es llevar el caso hasta el tribunal superior para que sean ellos los que decidan y tomen en cuenta las pruebas que no le permitieron presentar durante la defensa.
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