En el marco del Día del Padre, la Policía Metropolitana de Pereira rinde homenaje a los padres que, con su esfuerzo diario, contribuyen significativamente al bienestar de sus familias y comunidades. Este reconocimiento se extiende especialmente al Subintendente Édison Leonardo Ladino Caro, un padre dedicado y un profesional comprometido con su labor.
Édison Ladino Caro, oriundo de Riosucio, Caldas, lleva más de 15 años al servicio de la Policía Nacional, actualmente adscrito al grupo de policía comunitaria de la Estación de Policía Cuba en Pereira. A lo largo de su carrera, ha demostrado un compromiso inquebrantable con la seguridad y tranquilidad de las comunidades en las que ha trabajado, incluyendo el departamento del Cauca y, actualmente, la capital risaraldense.
A pesar de las múltiples responsabilidades que su rol conlleva, el Subintendente Ladino nunca descuida su papel como padre. Para sus hijas, Luciana y Celeste, es un verdadero superhéroe. Sus ocupaciones no le impiden dedicar tiempo y amor a sus “dos princesas”, quienes se benefician diariamente de sus enseñanzas y su ejemplo.
Este doble compromiso, tanto con su familia como con la comunidad, fortalece los lazos entre la institución policial y los ciudadanos. Su dedicación en el ámbito profesional y personal es un testimonio de cómo se puede equilibrar la vocación y la familia, sin que ninguna de las dos facetas se vea comprometida.
El Subintendente Ladino expresa que uno de los momentos más esperados de su día es el reencuentro con sus hijas, a quienes no duda en demostrar su amor y apoyo constante. Este gesto sencillo, pero profundo, subraya la importancia del papel paterno en el desarrollo y bienestar de los hijos.
La Policía Metropolitana de Pereira destaca la labor de todos los padres en el cuerpo policial que, al igual que Édison Ladino Caro, se esmeran por cumplir con excelencia en sus deberes familiares y profesionales. Además, de reconocer que cada esfuerzo y sacrificio realizado en el día a día es una contribución invaluable para sus familias y la sociedad.
“Ser papá es mi mayor orgullo, ser policía es mi vocación”, concluye el Subintendente Ladino, destacando esta frase el equilibrio y la dedicación que lo caracterizan.
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