El pasado 9 de junio, Luis Esteban Montoya Rodríguez sufrió un aneurisma cerebral mientras se encontraba en casa de sus abuelos. Hoy su historia se transforma en una lección de solidaridad y humanidad en medio de la tragedia.
Tras el fallecimiento, los padres del niño de 12 años tomaron la decisión de donar los órganos, un acto de generosidad que permitirá a otros menores tener una segunda oportunidad de vida.
Leonardo Montoya, padre del menor, dijo tomaron la decisión con la esperanza de que su hijo viva a través de otros. Así, se convirtió en el primer menor que dona su corazón para salvar la vida de otro niño.
Luis Esteban cursaba séptimo grado en la Institución Educativa Normal Superior del Quindío. Su memoria, ahora vivirá a través del generoso acto de donar su corazón.
Luis Esteban era conocido por su alegría, carisma y amor por el fútbol. Sus profesores y compañeros de clases lo recuerdan con admiración por ser un estudiante dedicado y siempre dispuesto a colaborar otros. Ahora, Colombia lo recordará como un héroe.
En las próximas horas, un equipo médico especializado llevará su corazón en un avión ambulancia a un hospital, donde otro niño espera esa oportunidad de vida.
Comparte esto: