Uno de los puntos de la protesta radica en las políticas de descentralización implementadas desde el gobierno de Álvaro Uribe Vélez. “Si bien esta medida buscaba llevar la educación a los territorios, en la práctica ha significado la pérdida de privilegios y prestaciones para los trabajadores”, dijo Jaime Alberto Bohórquez, presidente del sindicato de trabajadores de la educación (SINTRENAL) Risaralda.
La disparidad salarial entre aquellos nombrados por el Ministerio y los designados por las gobernaciones ha sido un tema de contienda constante, exigiendo la equiparación salarial bajo el principio de “trabajo igual, salario igual”.
El próximo 4 de junio marca el inicio de un importante acontecimiento para el sector educativo de todo el país. Bajo la consigna de “La Hora Cero”, los trabajadores decidieron iniciar un cese de labores en protesta por diversas problemáticas que afectan, no sólo a ellos, sino también al servicio educativo en su totalidad.
Con cerca de 30.000 trabajadores administrativos al servicio de la educación, la decisión de paralizar actividades no ha sido tomada a la ligera. Se busca llamar la atención sobre una “serie de injusticias y recortes que han minado los derechos laborales de este personal”, señaló Bohórquez.
El incumplimiento de acuerdos previos por parte del Ministerio de Educación Nacional ha exacerbado la situación. A pesar de varias mesas de trabajo y diálogos sostenidos, Bohórquez asegura que la falta de voluntad política para resolver las demandas de los trabajadores ha llevado al punto de ruptura.
La organización sindical nacional reclama el retorno al régimen anterior y la independencia de los entes territoriales en la gestión del personal administrativo.
Otro aspecto crucial es la insuficiencia de la planta de personal administrativo para hacer frente a las necesidades del sistema educativo. Con aproximadamente 30.000 trabajadores para atender un servicio que requeriría casi el triple de recursos humanos, “se evidencia una carga laboral desproporcionada”, explicó.
Finalmente, se demanda un trato equitativo y el reconocimiento de la labor del personal administrativo, equiparándola a la de otros actores del sector educativo. El presidente de SINTRENAL Risaralda, Jaime Alberto Borquez, destacó la importancia de ser tratados como iguales dentro de la comunidad educativa.
El paro convocado para el 4 de junio busca, según el sector sindicalista, corregir las injusticias que afectan al personal administrativo del sector educativo, no sólo en Risaralda sino en todo el país.
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