Seis jóvenes, presuntamente involucrados en actividades relacionadas con el sicariato, terminaron capturados en una operación conjunta denominada “Operación Erebo”.
La acción fue llevada a cabo por agentes de la Seccional de Investigación Criminal de la Policía Nacional, el Cuerpo Técnico de Investigación Criminal de la Fiscalía General de la Nación, con el respaldo de la Inteligencia Policial y la subestación de Policía Altagracia.
Las detenciones se realizaron en cumplimiento de órdenes judiciales por los delitos de concierto para delinquir agravado, secuestro extorsivo, homicidio agravado, homicidio en grado de tentativa, fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, y delitos conexos.
Según las investigaciones, los detenidos, liderados por alias “Orejas”, estarían vinculados a la organización criminal Cordillera, actuando principalmente en las zonas de la comuna Cuba y el corregimiento de Altagracia en Pereira. Se les atribuye el control territorial para el tráfico de estupefacientes, así como la comisión de homicidios y otros delitos.
Cada miembro del grupo, incluyendo a “El Soldado”, coordinador de sicarios, y a otros individuos conocidos como “El Mono, Berrinche, Yordan y el Zafre”, tenía roles definidos dentro de la organización.
La policía logró establecer su participación en diversos hechos delictivos, como homicidios ocurridos en el barrio Padre Valencia y el corregimiento Altagracia, así como otros incidentes de violencia armada.
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