En medio de la desesperación, Genaro Valencia habría salido de su casa a buscar a Michel Dayana. Con teléfono en mano y la foto de su ‘niña’ le preguntó a todos los que se cruzaron en su camino si la habían visto y entre esas personas estaba Harold Andrés Echeverry, el principal sospechoso del feminicidio.
La comunidad del barrió San Judas Tadeo, de Cali, aún está conmocionada tras el lamentable suceso. Este viernes, alrededor de las 08:00 de la noche, la policía anunciaba la desaparición y posterior hallazgo sin vida de la menor de 14 años dentro de un taller mecánico donde Harold Andrés laboraba como vigilante.
Michel Dayana había sido enviada por su padre para realizar una compra en un negocio local, pero no regresó a su casa. Según, la menor habría sido engañada y conducida hasta el taller, donde sufrió un destino trágico.
El padre de la víctima apareció este sábado en medios de comunicación y sus declaraciones fueron desgarradoras. Con tono de voz ahogado, el hombre dejó escapar una frase: “Se llevaron a mi niña”, dijo a Noticias Caracol.
Recientemente se supo que Harold Andrés Echeverry, el sospechoso, habría pertenecido al ejército y además, tenía antecedentes por abuso sexual con menor de 14 años en Tolima, aunque esta información aún no ha sido confirmada.
Sin embargo, el padre de la menor hizo otra confesión. Supuestamente, en varias ocasiones Echeverri habría acosado sexualmente a Michel Dayana, al punto que la adolescente se cambiaba de acera cuando caminaba cerca al taller.
La Policía Metropolitana de Cali continúa tras la búsqueda del hombre de 32 años y principal sospechoso del feminicidio. Además, el dueño del taller donde ocurrieron los hechos entregó información relevante sobre el asesino.
“Se dio a la fuga en un vehículo tipo motocicleta marca Discover de placa EQP 37D perteneciente a nuestra empresa”, dijo el propietario del establecimiento a través de un comunicado de prensa que se difundió a medios.
Cuando la policía ingresó al taller, se encontraron con evidencias perturbadoras, incluyendo trazas de sangre que guiaron a los investigadores hacia unas canecas y una maleta debajo de una escalera en un cuarto de almacenamiento.
La inspección minuciosa reveló que en ese lugar guardaban partes del cuerpo de la menor, confirmando así el trágico suceso durante la primera noche de velitas en la ciudad de Cali. “No sólo enlutó a una familia, sino que acabó con el sustento de otras nueve familias de trabajadores”, agregó el dueño del taller.
La Alcaldía anunció una recompensa de hasta $100 millones para la persona que aporte información importante que ayude a ubicar y capturar al presunto responsable de este hecho.
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