Si algo es característico de Pereira por estos días, es que hay demasiados motociclistas en la calle. A la fecha, el número de motos supera el 44% del total del parque automotor de la ciudad, superando la cifra de los 100 mil vehículos de dos ruedas registrados oficialmente.
Además, existe la posibilidad de que la población flotante eleve esta cifra aún más y que alcance un 48%. En una reciente declaración, Harold González, subdirector de movilidad de Pereira, alertó sobre este crecimiento exponencial.
Esta tendencia, aunque reflejo de la dinámica urbana, se ve acompañada de una preocupante estadística de siniestralidad vial, donde los motociclistas se erigen como actores preponderantes. El exceso de velocidad, la imprudencia y la falta de responsabilidad civil en la ejecución de maniobras arriesgadas se presentan como las principales causas de los accidentes.
Entre las infracciones recurrentes, destacan casos de conductores bajo los efectos del alcohol, así como la falta de documentación legal, como la omisión de la revisión técnico-mecánica. Ante este panorama, González asegura que las autoridades de movilidad están intensificando operativos de control en puntos estratégicos y horarios críticos, buscando reducir las incidencias y garantizar la seguridad en las vías.
El compromiso de la entidad se extiende más allá de las medidas coercitivas, involucrando programas educativosen colaboración con la Agencia Nacional de Seguridad Vial.
Con el objetivo de abordar las preocupantes cifras de siniestralidad, se están aplicando límites de velocidad en tramos específicos de la ciudad, identificados como áreas críticas. Además, se impulsa un programa de señalización vial que promueve velocidades seguras.
Este año, 66 personas han muerto en las vías de Pereira. De ese total, 32 eran motociclistas, el actor vial con el mayor índice de fatalidad en el área metropolitana.
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