La preocupación por el aumento de la delincuencia en Colombia alcanzó niveles alarmantes. Según el diputado Durguez Espinosa, se calcula que hay alrededor de 3 millones 500 mil armas en manos de personas, sin autorización, muchos de ellos delincuentes que las utilizan para secuestros, extorsiones y atracos a diario.
Si bien la Constitución garantiza el derecho a la vida, también reconoce el derecho a la legítima defensa. “Por ello, es imperativo que se impulse un proyecto de ley que regule el porte de armas en Colombia, permitiendo a los ciudadanos protegerse en un entorno cada vez más hostil”, dijo.
En una entrevista con Noticias360 Digital, señaló que actualmente hay 635 mil colombianos que cuentan con armas y permisos legales para portarlas. Sin embargo, “paradójicamente, un decreto emanado de la Presidencia de la República, prorrogado nuevamente por un año en diciembre, limita el derecho de defensa de los ciudadanos de bien”, agregó.
El diputado subrayó que el actual decreto presidencial, que limita el porte de armas, debe ser revisado con urgencia y, preferiblemente, derogado.
Asimismo, señaló que es necesario que se actúe con celeridad en este sentido, para evitar que los ciudadanos sigan siendo víctimas de la violencia descontrolada.
A juicio de Espinosa, el problema se agrava al observar cómo el Gobierno Nacional “parece estar más interesado en negociaciones infructuosas con grupos guerrilleros, como el ELN, que en garantizar la seguridad de sus ciudadanos”.
Para el diputado, esta falta de respuesta efectiva se traduce en una sensación de desamparo generalizado, con consecuencias devastadoras para la economía y la estabilidad social.
“En este contexto, es fundamental reconocer el sacrificio diario de nuestros policías y soldados, quienes enfrentan riesgos extremos en el cumplimiento de su deber. Sin embargo, es lamentable que, incluso en situaciones críticas, se vean limitados en el uso de sus armas, lo que compromete su capacidad para proteger a la población y garantizar el orden público”, apuntó.
Asimismo, dijo que el “desgobierno nacional” ha generado un escenario desolador, donde la paz y la seguridad parecen cada vez más lejanas por los constantes incumplimientos por parte de los grupos al margen de la ley, que desde su perspectiva, sólo agravan esta situación, dificultando aún más la búsqueda de una paz duradera y definitiva.
“Es evidente que se requiere una acción urgente y decidida por parte de las autoridades competentes para abordar esta crisis de seguridad que afecta a todos los colombianos. Es hora de poner fin a la inacción y adoptar medidas concretas que garanticen el derecho fundamental a la vida y la seguridad de todos los ciudadanos”, comentó.
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