¡Una pasión compartida por los motores y las carreteras! Más que un hobby, una familia llamada Harley Davidson

In Eje Cafetero, Especiales
junio 02, 2024

Pereira se convirtió en el epicentro de una reunión de moteros apasionados por las ruedas, los modelos y el ruido de los motores de Harley Davidson. Cerca de 700 pilotos de todo el país, e incluso de Perú y Aruba, llegaron a este evento con el único objetivo de compartir como una gran familia.

Los harlistas se distinguen por considerar su amor por las motocicletas como un estilo de vida. Henry Orozco, miembro del club Custom Brother de Bogotá, resume esta filosofía.

“Esto es algo que solamente el que se monta en una de estas y sale a rodar, sabe qué significa. Llevo 25 años rodando con estas hermosas máquinas, y he tenido la oportunidad de conocer toda Colombia, Estados Unidos, México y muchos otros países”.

DESDE PERÚ HASTA PEREIRA
Ernesto León Riquelme, del club Harley Davidson del Perú, compartió su experiencia de viajar desde Lima hasta la capital risaraldense. “Llegamos el jueves en la noche, después de recorrer 2,800 kilómetros cruzando Lima, Ecuador y Colombia. Para mí, ser Harlista significa libertad, amor y una pasión única”.

Ernesto cuenta que su afición por estas motocicletas inició desde muy niño, gracias a su padre, quien también era harlista. Ahora como un hombre adulto también trata de transmitir esta misma pasión a su hijo, quien en esta ocasión no pudo acompañarlo, pero asegura que también es un aficionado a las carreteras.

PAREJAS, AMOR Y FAMILIA
Juli Aguirre, del grupo Cafeteros Bikers de Pereira, destacó la importancia de las amistades forjadas en el camino. “Lo mejor de este mundo es lo que compartes en cada evento. Siempre se hacen nuevos amigos, es como una familia. Gente que nunca en la vida se ha visto, pero se encuentran en la carretera y comienzan una nueva amistad”.

De esta misma manera, Hugo Román Cardona, esposo de Juli y también motero de Pereira, describió la alegría de compartir esta pasión con quien lleva varios años recorriendo caminos: “Ella es más apasionada que yo. La pasión que tenemos por las motos nos ha permitido conocer muchos lugares y hacer amigos en todas partes”.

Pero esta no es la única familia que se enamoró de las míticas motos. Diego Vargas, un residente del municipio de Circasia, Quindío, habló sobre su reciente incursión en el mundo Harley: “Llevamos sólo dos años en esta pasión, pero ya tenemos dos motos y no me siento bien si no salgo a rodar con mi esposa. Esto es más que un hobby, es una hermandad. Donde quiera que uno vaya, encuentra harlistas que te acogen como si fueras su hermano”.

Patricia, la esposa de Diego, confirmó lo agradable que es formar parte de un nuevo grupo de amigos. “Nosotros acabamos de llegar de un viaje y nos encontramos personas en el exterior y se dieron cuenta que éramos harlistas y se nos arrimaban. Nos hablaban, nos acogían. Nos decían cuando vengan por aquí rueden con nosotros, les damos el número”.

ALGUNOS SÍMBOLOS DE LOS HARLISTAS
La hermandad entre los harlistas es un aspecto fundamental de su cultura y estilo de vida. Este vínculo se caracteriza por varios elementos clave:

  1. Comparten una camaradería profunda, basada en su pasión común por las motocicletas. Esta se manifiesta en eventos, reuniones y viajes, donde los harlistas se apoyan mutuamente y celebran su amor por las máquinas.
  2. En la comunidad harlista, la solidaridad es un valor central. Los miembros se ayudan entre sí en diversas situaciones, ya sea en la carretera, durante eventos o en momentos personales difíciles.
  3. La hermandad harlista se basa en el respeto mutuo y la lealtad. Las diferencias y singularidades de los demás, junto a la lealtad es un principio fundamental, lo que crea un ambiente de confianza y compañerismo.
  4. La hermandad trasciende fronteras. No importa de dónde vengan, siempre encuentran un sentido de pertenencia en cualquier parte del mundo.
  5. Un aspecto distintivo, es el apoyo en la carretera. Si un motero tiene problemas mecánicos, otros siempre están dispuestos a detenerse y ayudar. Esta disposición a asistir a los compañeros crea un sentido de seguridad y confianza en el camino.